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La arquitectura durante las vanguardias

"Podemos sintetizar en unos cuantos puntos las características de la nueva arquitectura del siglo XX:

1. Los distintos estilos coinciden en una reacción extrema contra el exceso ornamental de los estilos históricos y del modernismo. El arquitecto pone por delante la funcionalidad a la belleza del edificio, porque ésta no debe radicar en su decoración sino en la sencillez y en la adecuación a la función a la que está destinado.
Adolf Loos. Edificio de vivienda, Viena, 1911.
2. Tanto las fachadas como los espacios interiores y los volúmenes se transforman. En parte ello es debido al uso de nuevos materiales como el acero, el hormigón armado o el vidrio, que asoman al exterior sin revocos y que hacen posible espacios abiertos y diáfanos, sin apenas elementos de sostén.

3. La estética se mueve entre la búsqueda de la desnudez y de la simplicidad geométrica y la adecuación con la naturaleza. Podemos decir que tras unos tanteos apegados a los presupuestos artísticos de las vanguardias figurativas de las tres primeras décadas (arquitectura vanguardista) y la arquitectura generada por los regímenes totalitarios que buscan una dimensión propagandística, la arquitectura evolucionará hacia un lenguaje propio a partir de los años 20 y 30 canalizado por medio de dos tendencias principales, el racionalismo y el organicismo, que no fueron necesariamente antagónicas y que reinarán tras la II Guerra Mundial.

Auguste Perret. Notre Dame Le Raincy, Francia, entrada 1923-24.
También las iglesias se apuntarán a la nueva estética y los nuevos materiales. Hormigón y vidrio.

4. Algunos críticos consideran que el resultado final llevó a una arquitectura sin gracia, monótona y repetitiva, y que con estos presupuestos artísticos se ha conseguido que cualquier ciudad del mundo tenga el mismo aspecto que las demás, eliminándose las características propias. La verdad es que no siempre es así, ya que pese a la simplicidad y uniformidad de las obras cada arquitecto que supo darle a sus obras el toque personal.

LA ARQUITECTURA DE LAS VANGUARDIAS DE PRINCIPIOS DE SIGLO

Desde principios de siglo XX surge una serie de arquitectos que pretenden romper con las tradiciones arquitectónicas a la par que las vanguardias figurativas. La oposición al decorativismo modernista, la tendencia a la sencillez y a la geometrización de formas y la recreación personal de las respectivas estéticas pictóricas es lo que les une. La mayor parte de sus obras son visiones utópicas que se quedaron en el papel, pues resultaba imposible construirlas.

- Protorracionalismo: No forman propiamente una escuela sino que son arquitectos que preludian en distintos países el funcionalismo antes de la Primera Guerra Mundial.
Es el caso del vienés Adolf Loos, autor del libro "Ornamento y delito" (1908) y sus edificios de viviendas en esta ciudad la Casa Steiner (1910) y la Casa de Gustav Scheu (1912) .
Adolf Loos. Casa Gustav Scheu, 1912, Viena.
El del francés Auguste Perret, quien inició el uso sistemático del hormigón armado como material constructivo en las viviendas de la calle Franklin de París o en el garaje de la calle Ponthieu y que en 1922 realiza su obra más conocida, la iglesia en hormigón, acero y vidrio de Notre Dame du Raincy;
El de Peter Behrens en Alemania que diseña en 1909 la rotunda estructura espacial de la fábrica de turbinas de la A.E.G. en Berlín, paradigma de la construcción industrial, porque el edificio debía ser el exponente de la calidad del producto realizado.

- Futurismo italiano. Antonio Sant´Elia en 1914 publica el Manifiesto de la arquitectura futurista en 1914. Su prematura muerte hace que sus proyectos no puedan cristalizar. Sus propuestas anunciaban la ciudad del futuro y fueron más influyentes en la segunda mitad del siglo XX. Sus dibujos para una central eléctrica y viviendas de 1914 son todo un mito de arquitectura dinámica.
Antonio Sant´Elia Estudio para edificio de viviendas y ferrocarril. 1914.
Sorprende la modernidad del diseño.
- Neoplasticismo holandés: Es el ejemplo más representativo. Muy cercano al funcionalismo, aunque poseen unas características que les hacen singulares. Así, por ejemplo, Gerrit Rietveld en Villa Schroder (1923-24), en Utrecht, utilizó formas geométricas claras y rectilíneas, colores blancos, combinados con planos y detalles de cromatismos primarios que asemejan sus fachadas con cuadros de Piet Mondrian en tres dimensiones. Además buscó crear un espacio abierto con una planta libre de soportes. El mobiliario también reflejaba los presupuestos del movimiento.
    Gerrit Rietveld. Casa Schröeder, interior. Utrecht, Holanda, 1924.

- Expresionismo: los arquitectos expresionistas alemanes tienen la voluntad de asombrar y crear reacciones en el que vista sus edificios. Se desmarcaron los criterios funcionalistas por alegar que no eran artísticos.
Bruno Taut soñaba con edificios prismáticos flotantes donde los muros y las cúpulas fueran de cristal. Sus realizaciones más importantes las hizo para la Exposición del Werkbund de Colonia de 1914. 
Hans Poelzig levanta en 1919 el Gran Teatro de Berlín, un edificio fantástico. Su vestíbulo recibe a los espectadores con un gran pilar a modo de palmera que prepara el ánimo del visitante, que se quedaabsorto al acceder al salón principal, concebido como una cueva con techos de estalactitas.
Hans Poelzig. Gran Teatro de Berlían, palmera del vestíbulo, 1919. Destruido.
Eric Mendelshon potenció las formas orgánicas y fluidas, los juegos cóncavos y convexos y el carácter escultórico, acercándose, si cabe la comparación, a la estética de Gaudí y el modernismo. La obra más representativa es el conocido Observatorio Einsten en Postdam (1917-21).
Mendelsohn. Torre Einstein, expresionismo, 1917-21.
- Constructivismo ruso: Tatlin, proveniente de las artes figurativas, fue su representante más notable. Quiso hacer del constructivismo la expresión del avance dinámico de la Revolución en Rusia. Su proyecto para el Monumento a la III Internacional (1919) fue su gran obra, pero no llegó a construirse, aunque dejó maquetas gracias a las cuales podemos hacer una reconstrucción virtual. Se trataba de una torre de unos 400 metros de alto, superando en altura a la Torre Eiffel. Consistiría en una estructura espiral de hierro y acero, volcada hacia un lado en el ángulo del eje terrestre, conteniendo en su interior cuatro estructuras de vidrio con diferentes formas: un cubo, una pirámide, un cilindro y media esfera. Todos estos elementos rotarían a distintas velocidades."


Fuente: http://algargosarte.blogspot.com.uy/

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