Cómo matar una mosca





























Cómo matar una mosca, recrea dicha acción desde la perspectiva de 15 estilos pictóricos, con humor y de forma muy ilustrativa, nos ofrece un sintético paseo por variados lenguajes artísticos. 

“Greetingman” en Montevideo

Una nueva estatua con forma humana de color celeste en posición de reverencia sorprendió a los montevideanos que transitaron por la rambla. 
Y es que se instaló en la Plaza Corea (Juan M. Espinosa y Av. Ing. Juana Pereyra, rambla del Buceo), la escultura “Greetingman”, de seis metros de altura, donada a Montevideo por el gobierno surcorano. Su autor es el artista surcoreano Young – ho Yoo.
La obra será inaugurada hoy miércoles 24 por la intendenta de Montevideo, Ana Olivera.

"Los comentarios, las críticas y las discusiones no se hicieron esperar: el mismo viernes, el tema inundaba las redes sociales y durante el fin de semana se convirtió en tema de controversia, a veces con humor, a veces con fastidio, entre los habitantes de la capital. Este miércoles la intendente Ana Olivera encabezará la ceremonia de inauguración de esta obra al tiempo que se bautizará como “República de Corea” el espacio público donde está emplazada. Interrogada sobre como se resolvió la aceptación de esta obra (entendida como una donación no solo del artista sino del propio Gobierno de Corea), la jerarca municipal dijo a 'En Perspectiva', que la IMM “siempre analiza la propuesta y nos parece que cuando hay pasos previos en los que el país y una ciudad plantean un hermanamiento con Montevideo se aceptan las donaciones en general y cuando estas propuestas se hacen para acercar culturas la IMM lo toma como un acto de amistad”. “En su estética puede que nos resulte distinta pero nos pareció que cuando un escultor le hacía un homenaje a la ciudad era importante incorporar la obra. El autor no quiso representar ninguna raza sino ser universal y acercar a las dos culturas distintas. Esa es la expresión que nos traslada el escultor y la Embajada y nos pareció interesante conocer y hacerla conocer”, agregó Bianchi. La titular del Departamento de Acondicionamiento Urbano de la IMM, señaló que “es difícil hacer una valoración artística, porque además seguramente los gustos estéticos de los ciudadanos de Montevideo y el mundo deben ser diferentes”. Lo que ocurrió en este caso es que “se nos planteó un símbolo de amistad y cuando hay una donación no hay asesoramiento. Cuando hay asesoramiento es cuando la IMM resuelve colocar una escultura para la cual llama a un concurso de ideas y en ese caso se hace un valoración artística”... A criterio de la jerarca “lo que pasa es que los uruguayos estamos acostumbrados a una estética distinta. Quizá nos llame la atención el material con que la estatua esta hecha o el color”. Consultada sobre el motivo por el cual la comuna capitalina no consultó a la Comisión Honoraria de Patrimonio de la Rambla, Bianchi reconoció que no se hizo pero aclaró el carácter asesor y no decisivo de este grupo de trabajo. "Las comisiones son asesoras, recomiendan pero no avalan. Se ofrecieron varios lugares uno de los pedidos que hacia el artista y el Gobierno de Corea era que el espacio en que se colocara fuera la Rambla” porque “es un espacio muy visitado y reconocido”... Al cierre de sus declaraciones la jerarca municipal declaró que lo que se buscó con la instalación de este monumento fue “avanzar hacia una ciudad más amplia e inclusiva y disfrutar algo que, quizá los ciudadanos que viajan puedan verlo, pero los que no, sólo puede disfrutarlo en la ciudad. Con esto se ve la diversidad”.

Bienvenida sea una nueva propuesta que nos ejercite la sorpresa, la mirada y nos exija repensar la escultura pública desde una propuesta estética diferente a lo que estamos acostumbrados -tanto por su forma, color, composición, dimensiones..., así como por lo que pretende representar-. 


Datos de: 
http://www.montevideo.com.uy
http://www.espectador.com

El negocio del arte

En el "mundo del arte", los "expertos", las falsificaciones y la autenticidad  de las obras de arte parecen un juego de Wall Street o, mejor dicho, de CSI Miami. Pero, lo que realmente está en debate es quién asegura que una obra de arte merece la pena ser cotizada y cuál no. Un documental que transita las peripecias de un cuadro que no parece querer revelar su creador. 
 
“Quién mierda es Jackson Pollock?” es la pregunta que se hace Teri Horton, una camionera malhablada de 70 años, cuando alguien le dice que el cuadro que ella compró por 5 dólares para regalarle a una amiga podría ser un original de Jackson Pollock, cuyo valor podría llegar a los 50 millones.
“Quién mierda es esta vieja?” es la pregunta que se hace el establishment artístico de Estados Unidos, que no está dispuesto a permitir que una camionera ignorante de un pueblo perdido de California tenga la osadía de cuestionar sus dictados sobre qué es arte y qué no. No importan los resultados de las pruebas científicas. En el fondo, no importa si el cuadro fue realmente pintado por Paul Jackson Pollock. Lo único que importa es la bendición de un “experto” para que el cuadro pase de no valer nada y ser considerado una basura a ser un “verdadero Pollock”, que valga 50 millones de dólares y esté colgado en las paredes del Metropolitan.



Material obtenido gracias a:http://lalulula.tv

Yinka Shonibare

Nació en Inglaterra en 1962 y creció en Nigeria, Yinka Shonibare actualmente vive y trabaja en Londres, donde ha ganado la atención internacional mediante la exploración de temas de raza, cultura y clase a través de una serie de medios de comunicación que incluye escultura, pintura, fotografía y arte de instalación. La adopción de una rica y compleja temática, el enfoque poco convencional, se puede decir que son unas de las características de éste artista, así como el interés por eliminar las fronteras entre el diseño, la etnografía y el arte contemporáneo. El humor se une con la ironía a la hora de abordar temas históricos, políticos y sociales. Sus obras, al mismo tiempo inocente y subversivas, se posicionan frente a una serie de actividades culturales e histórica re-significando los conceptos convencionales. Una propuesta lúdica, colorida, en algunas ocasiones ostentosa, de diseño casi artesanal, pero que tienen algo de perturbador o extraño (por ejemplo cuerpos sin cabeza). En éste caso presento una serie de esculturas, en su mayoría se utilizan maniquíes, vestimenta que apela a la Inglaterra "noble" del siglo XVIII al XIX pero con estampados de diseño africano.
Galantería y Conversación Penal de 2002
Rayuela, 2000,  Cera impresa de textiles de algodón y zócalo de madera, figuras: 43 x 20 x 20 pulgadas cada uno, Plinto: 5 x 75 x 54 7.8 pulgadas.
¿Cómo hacer estallar dos cabezas a la vez? (Damas), 2006 Dos maniquíes, dos pistolas, neerlandés, cera impresa textiles de algodón, zapatos, botas de montar de cuero, el zócalo.


El reverendo sobre hielo, 2005. Maniquí de fibra de vidrio, neerlandés cera impresa algodón, acero. Propuesta que re-significar la obra "El reverendo Walker patinando en el lago Duddington" de sir Henry Raeburn de 1784, obra enmarcada dentro de lo que es el Neoclasicismo inglés.
Lucha por África, (2003). Obra que a mi juicio tiene un valor didáctico sin igual, a la hora de encarar el tema del Imperialismo. Estos personajes representan el reparto de África tras la conferencia de Berlín a fines del siglo XIX. Jerarcas europeos sin cabeza, pero vestidos con diseños africanos, son la fiel representación de una cultura que se impone, se apropia de otra. Un juego extraño de metáforas contradictorias entre dominado y dominador.
El columpio (después de Fragonard), 2001.  
Es una re-interpretación a la obra Los felices azares del columpio  también conocido en inglés como "The Swing" (El columpio), cuadro del artista francés Jean Honoré Fragonard icono del arte rococó, realizado en 1767. Representa una escena galante en un ambiente idílico. Una joven se balancea en el columpio que empuja un hombre mayor (seguramente su marido) mientras que abajo, a la izquierda, aparece un joven que mira debajo de su falda. El marido queda relegado a la sombra, mientras que el joven amante luce en primer plano, entre vegetación y flores. El adulterio era una práctica común entre la aristocracia, donde predominaban los matrimonios por interés. El joven se encuentra tumbado a los pies de una escultura de Cupido. Dicha figura esconde una pista: pide silencio con un dedo en sus labios, lo que alude a un secreto.

Material elaborado gracias al aporte de:
www.yinka-shonibare.co.uk